lo cual es una situación pre-coma. Y en este estado se encontró con Dios:
- ¿Qué es esto? - preguntó ella al Creador: ¿Yo morí?
- No, según mis cálculos, morirás desde aquí 58 años, 6 meses, 15 días y 20 horas - respondió, el Eterno.
Cuando volvió en sí, sabiendo cuánto tiempo le quedaba de vida, decidió, allí mismo, en esa clínica, hacer
una liposucción, una cirugía plástica de restauración en los senos, una cirugía plástica en la cara, la nariz, el vientre,
se quitó todos los excesos, se volvió hermosa, juvenil y fue dada de alta una semana después.
Al día siguiente, mientras cruzaba una avenida, un vehículo llegó a gran velocidad y la atropelló,
matándola en el acto. Cuando se encontró de nuevo con Dios, le preguntó:
- Vaya, Señor Dios, pensé que me quedaban 58 años más de vida. ¿Por qué morí?
¡Justo después de todo ese gasto con las cirugías plásticas!
Dios se acercó a ella y la miró directamente a los ojos y le respondió:
- ¡Te juro, que no te reconocí!